No son pocos los artistas que parecen querer desprenderse de
su pasado y crear una nueva leyenda en torno a su labor productiva, pero quizá
uno de los casos más llamativos sea el del danés Trentemoller, antaño hitmaker
y revientapistas; y que, desde aquel Into The Great Wide Yonder, ha pretendido
reinvertarse y darse a conocer como el nuevo nombre a tener en cuenta en la
escena post rock y la indietronica; y es que tras esa exaltable muestra que
supuso su anterior trabajo en largo; da un paso más allá y nos presenta; a
través de la plataforma In My Room, su trabajo más ambicioso hasta la fecha; el
impresionante Lost.
Esta vez, el artista va mucho más lejos, incluso llega a
olvidarse de que durante unos años hacía temblar las pistas de baile con ese
electro house del que el máximo exponente, renegando del mismo, y para cerrar
definitivamente esa etapa, nada mejor que rodearse de algunos de los máximos
exponentes de la escena indie rock.
Muchos ya habrán tenido la oportunidad de escuchar temas
como Never Stop Running, donde colabora Jonny Pierce, el vocalista de The
Drums, para ofrecernos su particular homenaje al sonido Joy Division; o el
delicado Candy Tongue, con el aporte vocal de la también danesa, y colaboradora
habitual de Anders, Marie Fisker; con un denso y oscuro tema, que destila
cierto aroma al Nick Cave mas melódico y sentimental.
La cosa no queda aquí, ya que se suman a esta oscura fiesta
artistas de la talla de Kazu Makino; la japonesa líder de la banda Blonde
Redhead, que nos trae su misticismo a lo Zola Jesus; con el tema Come Undone;
los norteamericanos Low, con ese épico The Dream; donde se acercan a la
densidad de grandes como Radiohead; Sune Rose Wagner, miembro de The
Raveonettes, y que ayuda a potenciar el sonido gótico, electroide y oscuro de
Deceive, como unos Jesus & Mary Chain, pasados por el tamiz de Neu!, o Jana
Hunter, de la banda nortemericana Lower Dens, que parece emular a Depeche Mode
en el electrificante Gravity.
Algo más optimista se muestra con el bailongo River Of Life,
con la intervención de la banda danesa Ghost Society, facturando un rock épico
y sintético, con tributos al sonido New Order o Happy Mondays o en el poderoso
Still On Fire, esta vez flirteando con un post rock de corte industrial muy a
lo Cabaret Voltaire.
La suciedad que se desprende del rock electrónico y pausado,
de nuevo con referencias a lo Depeche Mode, de Trails, se contrapone con el
electro tech trotonero y rave de Constantinople; el krautrock de Morphine o el
electro juguetón, y donde más se nota su pasado pistero, del enérgico Hazed.
Lo que el danés ha conseguido es una nueva, y sorprendente,
vuelta de tuerca, calibrando hacia un estilo que parece dominar a la
perfección; quizá resulte demasiado ambicioso, un factor que a veces juega en
contra del artista, pero en este caso, esa ambición no ha errado el tiro y este
no ha salido por la culata, sino que ha conseguido ofrecernos una obra llena de
gloriosos momentos y de la que poco se puede reprochar. Puede que estemos ante
el nacimiento de una nueva estrella del rock. Mientras tanto nos seguiremos
perdiendo en el enrevesado universo de este artista.
Tracklist:
Trentemoller – Lost (In My Room)
01. The
Dream (feat. Low)
02. Gravity
(feat. Jana Hunter of Lower Dens)
03. Still
On Fire
04. Candy
Tongue (feat. Marie Fisker)
05. Trails
06. Never
Stop Running (feat. Jonny Pierce of The Drums)
07. River
Of Life (feat. Ghost Society)
08.
Morphine
09. Come
Undone (feat. Kazu Makino of Blonde Redhead)
10. Deceive
(feat. Sune Rose Wagner of The Raveonettes)
11. Constantinople
12. Hazed
Fuente: Hispasonic
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