Vince Watson – Atom EP (2011, Tresor Records)

Nada más y nada menos que la referencia 239 del legendario sello alemán Tresor, nos llega firmada de la mano de uno de los artistas techno más respetados y valorados a nivel underground, el productor de Glasgow, Vince Watson. Tras una primera escucha, nos encontramos ante un disco muy “Watson” y poco “Tresor”, si lo comparamos con el sonido oscuro, contundente y, en algunos casos, de cierto corte industrial que caracteriza al sello alemán. Sin embargo, la historia que yace tras este “Atom EP” es, cuanto menos, digna de mención.

Vince Watson siempre se ha mantenido fiel a su sonido, a sus principios, a una idea del techno fomentada por diversas influencias, entre las cuáles el propio Watson ha confesado que se encuentran el Hip Hop o sus estudios en la Royal Academy of Arts, Music and Drama en Glasgow. Sin embargo, sería una carta la que pondría en contacto al sello alemán con el artista escocés, una carta de admiración y respeto que el propio Vince escribió, junto con una petición para poder publicar en uno de los labels que, definitivamente, marcaron su trayectoria como artista. Y desde esa carta hasta la materialización del sueño del sr. Watson en esta nueva entrega, “Atom EP”. Vayamos ahora al grano, al contenido, a lo realmente importante, la música.
El disco se compone de tres tracks, el homónimo Atom, al que se suman Flux y Kaleidoscope. Atom es un track de corte puramente techno, agresivo, donde las atmósferas creadas por los synthes crean una sensación envolvente hasta los ansiados breaks, donde entra en juego el Detroit más planeador, a la vez que combatiente y agresivo. La cantidad de capas y texturas sonoras imprimidas en este trabajo nos recuerdan al sonido del mejor
Carl Craig. Sonido añejo, al que nos tienes acostumbrados Watson y, si bien no es del material que más abunda en el catálogo de Tresor, lo cierto es que, desde un punto de vista histórico, los sonidos de Vince, bebiendo tanto de Detroit como del techno europeo, se hacen un hueco a la perfección.
Flux se adentra, todavía más, en el sonido Detroit, con esos pads juguetones que matizan el track, mientras que atmósferas muy influenciadas por el dub sirven de telón de fondo a un discurso musical de los que escasean a día de hoy. Menos directo, contundente y electrificante que Atom, Flux destaca por dejar respirar, por devolver el aliento, por rescatar ese atisbo de esperanza que siempre quedará en la ciudad del motor.
Finalmente, en Kaleidoscope, y haciendo honor a su título, nos ofrece un discurso musical totalmente planeador, deudor de Dj Rolando, de Los Hermanos, del Detroit soñado, donde melancolía y rabia se fusionan para levantar almas y callar bocas. Un track precioso que sirve de perfecto broche final a un EP que suena más a techno que muchos de los que se proclaman defensores, a día de hoy, de dicho sonido.
Vince Watson y Tresor, un productor blanco con alma negra, un club europeo que debe sus orígenes a América. Un puente entre dos mundos, muchas veces cruzado por muchos artistas, aunque hacía tiempo que nadie perfilaba de esta manera el poder sonoro del eje Berlín-Detroit. Uno de esos discos que te hace comprender que el techno va más allá de fronteras geográficas o políticas, un sonido universal con potencial para extenderse por toda la galaxia.