Manuel Kiparski es Manuel Tur, germano de raíces hispanas
(de ahí ese nombre tan de…Tomelloso, por ejemplo) que dejó con el culo torcido
a unos cuantos -entre los que me incluyo, por supuesto- cuando comenzó a
publicar temas en Freerange allá por el año 2007. Y si sus exquisitas maneras a
la hora de producir no eran suficientes, sabiendo que por aquel entonces apenas
pasaba de los 20 años, más alucinados nos quedamos. Qué jodío el chaval, renovando
el house más deep y emotivo sin pasar de los 25 añitos. Ya les gustaría a
muchos Guetta jetas tener la mitad de talento que el que gasta don Manuel.
Y tres años después de su debut en formato LP (el muy pero
muy reivindicable “0201″, también editado por la disquera inglesa Freerange), y tras
haber seguido marcando el camino a multitud de productores en sellos como Poker
Flat u Ovum, Manuel Tur vuelve para presentarnos -atención al topicazo, pero
cierto hasta decir valium- su mejor trabajo. Que sí, que ya sé que eso lo dicen
absolutamente todos los artistas cuando presentan nuevo disco, pero es que en
este caso, es una verdad como un templo.
Sofisticando su ya de por sí elegante propuesta, casada con
el deep house más estiloso, Tur ha confeccionado un disco que bascula (casi)
perfectamente entre las sonoridades accesibles, fresquitas y, digamos,
sencillas, con sonidos barrocos, recargados y lisérgicos. Es decir, que ha
crecido como artista, y eso es mucho decir en un tipo como Manuel Tur, dotado
de un talento para la música de baile como pocos hoy en día. Esa delicadeza
melódica, esos tratamientos vocales, esos beats sedosos, esos pianos tan bien
puestos, esas basslines que te atrapan cual dronga dura…¿el disco del año?
Esperaremos a diciembre, pero desde luego que este “Swans reflecting elephants”
es uno de los candidatos más firmes.
Puedes escuchar este disco aquí. http://soundcloud.com/manueltur/sets/swans-reflecting-elephants/
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